El viernes pasado por la noche, una joven del Barrio Villa Constitución dio un nuevo paso en su afán de cumplir un sueño: convertirse en una misionera regular al servicio del Señor y sus hermanos. Acompañamos a Agustina (muy pronto Hermana Altamirano) en esa noche tan especial para ella y su familia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario