En este video, titulado “Vivir por el Espíritu”, el élder y la hermana Holland hablan sobre esos años ocupados y desafiantes.
“Ser llamada a servir a nivel general fue un gran honor para mí. Pero me puso de rodillas. Fue realmente muy abrumador”, dijo la hermana Holland.
El élder Holland agregó: “Fue un tiempo difícil. El presidente [Gordon B.] Hinckley dijo más tarde: ‘No sé qué nos poseyó para hacer eso’. Pero lo sé. Pat era esencial. Lo digo con toda la parcialidad que puedo atribuirme. … Creo que ella dio todo lo que podía dar al programa de las Mujeres Jóvenes. Y aprendimos a ser disciplinados y a ayudarnos unos a otros”.
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